
Un baño en una piscina natural labrada en la roca
Pequeña, de arena oscura y en forma de tómbolo. Así es la playa de Estaño, una cala semiurbana a tan sólo cinco kilómetros de Gijón. Con buenos equipamiento y un fuerte oleaje, se recomienda para el baño su margen izquierdo, aunque hay que mantener la precaución debido a su fondo rocoso.
Destaca en Estaño el Pozo del Cura, una piscina natural labrada en la roca. Además, en su sector occidental se encuentra el islote de La Tortuga. Es un arenal muy adecuado para practicar el buceo y la pesca submarina.
Observaciones: Tiene vegetación y es una zona protegida